Wednesday, October 17, 2007

Una historia genial

Esta historia la escuché el día de mi cumpleaños de parte del Pablo Pérez "El Perro Cuenta-Cuentos" y decidí compartirla con ustedes.

Cuenta la historia de una persona quien se estaba divirtiendo como enano en Disneyworld. Después de una larga e interminable fila la chica que acomoda a los paseantes indica que hay lugar para uno solo más, era el turno de esta persona a quien nombraremos Charlie a falta de nombre, pero antes de que la chica quitara la cadena para dejarlo pasar, entra por otro carril un ayudante del parque empujando a una persona en silla de ruedas.

Obviamente la chica vuelve a colocar la cadena y le indica a su compañero que efectivamente queda un solo lugar, el cual a todas luces será entregado al tipo en silla de ruedas. Charlie protesta:

"Hey hey hey, un momento, ¿qué es esto?"

"El señor va a pasar..."

"¿Pero por qué? ¡Que haga fila!"

"Es que el señor viene en silla de ruedas" contesta el dependiente.

"¿Y?"

"Es una persona discapacitada (en inglés políticamente correcto: physically challenged)."

"¿No puede hacer fila sentado en su silla? Es más cómodo hacer fila sentado..." responde Charlie

Mientras el tipo en su silla de ruedas observa en silencio sin decir una sola palabra. La discusión sigue:
"¿Qué el señor no es capaz de hacer fila?" cuestiona Charlie

"Es una persona con capacidades especiales"

"¡Capacidades especiales mi trasero!"

"Debe usted respetar a las personas con capacidades especiales señor" responde molesto la chica encargada de sortear la larga fila de personas, quienes empiezan a mostarse impacientes por el desenlace de esa novela instantánea de la vida real.

"Yo les tengo respeto, pero espero el mismo respeto a cambio" dice Charlie mientras voltea hacia el tipo en silla de ruedas.

"¡Dime en este momento que no eres capaz de hacer lo que hice yo, dime que mereces consideración porque eres MENOS que yo, y te cedo el lugar que me corresponde!"

"El tipo en silla de ruedas mira a Charlie a los ojos, quita el freno de las ruedas, se sale de la fila vacía de discapacitados y se va a hacer fila como todo mundo."

La mitad de la fila aplaude a Charlie y la otra mitad lo abuchea. A Charlie le importa un reverendo cacahuate la opinión de los demás, se sube a la atracción y la disfruta como enano.

Transcurre el día y casualmente coinciden en un puesto de salchichas. Cruzan la mirada y la sostienen, el tipo mueve los brazos para avanzar su silla hacia Charlie, se le acerca, le extiende la mano y le dice "Soy Tom... y te quiero dar las gracias"

Charlie, un poco perplejo, le contesta:

"¿Gracias por qué?"

"Porque eres la única persona en mucho tiempo que me ha tratado como un igual."

"No hay de qué Tom. Soy Charlie, por cierto..."

"Que te parece el parque Charlie?

"Me estoy divirtiendo, lástima que hay mucha gente y hay que hacer mucha fila en las atracciones más divertidas"

"Ven conmigo Charlie, tendremos que utilizar a nuestro favor las políticas de Disneyworld para discapacitados."

Charlie y Tom se meten a una de las atracciones más divertidas, la cual tiene un fila laaarga, pero se meten en el carril de los discapacitados la cual está vacía.

"Tom ¿Por la fila de los discapacitados? ¿Qué hay de la igualdad y el trato equitativo? Yo creo que eres bastante normal"
"Lo sé, pero ellos no lo creen, por eso me van a dejar pasar primero. ¡Empújame!"

Llegan hasta adelante de la fila, la encargada quita la cadena a Tom y la vuelve a poner a sus espaldas sin dejar pasar a Charlie. Tom voltea y dice al encargado:

"Él viene conmigo..."

La dependiente quita la cadena y le deja pasar.

Charlie y Tom se pasaron el día divirtiéndose como enanos. Charlie comenta que ha sido uno de los días más memorables de su vida.

Encontró a un amigo.

Tom encontró a un igual y se encontró a sí mismo.

Gracias Mr. Perro por compartir esta historia con tu servidor.

Wednesday, October 10, 2007

Del Interés Social

Interés Social; qué extraña frase, sobre todo para referirse a uno de los conceptos de la economía social, es decir, la economía en favor de la persona promedio, que en promedio, son los que menos tienen. Me quiero referir a las famosas "casas de interés social".

Me pregunto yo, ¿qué coños se piensan las constructoras? Creo y pienso que hay una proporción directa entre el espacio habitable de dichas casas y la capacidad craneana de estos individuos.
He vivido en casas donde la distancia entre defensas de mi vehículo es mayor al frente de la casa. Hablo con los pelos de la mula en la mano. En definitiva NO, no se puede vivir con decoro de ese modo (y eso que solamente éramos la guera y yo en aquél entonces).

Uno piensa, chale! Qué delicado me saliste, pues así viví yo de estudiante, hacinado. Pero ¿qué sucede cuando están hacinados y acomodados como tamales tú, tu esposa y tus tres hijos? La historia cambia.

Es un pedototote intentar acomodarte en una casucha de esas. No cabe la tele, o el ropero, o el burocito, un librero, la compu, siempre tienes que sacrificar un espacio en aras de algún mueble.

No tienes espacio libre, te tropiezas con todo y todos. Un único pinche baño con regadera en la casa para que se duche toda la familia en la mañana, claro pero para eso tienes que levantarte desde las 5 am para llegar a tu trabajo a tiempo. Es de lo p.peor el sentimiento de la falta de espacio vital... así sentí cuando me dijo una vez mi mujer cuando recien casado, "No caben TUS cosas".

Y todavía quieren los constructores reducir el espacio a 39 mts. cuadrados para casa-habitación. Como diría un famoso bloguero (famoso por soez) "no no no no no mames salav..."

No hay nada como tener espacio para crecer, para estirarse, para respirar... para vivir. No hay nada como TENER ESPACIO! PUNTO.

[Un agradecimiento especial a Calibos el gato por prestarse para ilustrar semejante desvarío humano(?)]

Constructores, funcionarios de la SEDESOL, fraccionadores... chinguen a su madre! Dejen de joder al prójimo.