Friday, October 17, 2008

De "La Jarochita"

Siempre hemos sabido que en la sociedad mexicana, los que tienen mucho dinero suelen portarse como los dueños del mundo, hacer lo que les venga en gana y los demás deben doblegarse ante su voluntad.
Sin embargo, por más cabrón que uno sea, siempre se topa en algún momento con la horma de su zapato... tal es el caso de mi ex-jefe. Que cuando aún trabajaba para él, un día me invitó a mí y a otro compañero a desayunar al Sanborns de Plaza Real para platicar sobre algunos temas relacionados con la empresa.

Recién entramos al restaurant y demandó a la capitana de meseras que le dieran su mesa favorita...
- La tenemos ocupada ingeniero, pero ahorita le desocupamos otra.
- Bueno, pero quítale toda la mierda que los demás dejan, la quiero limpiecita!

Rápidamente limpiaron una mesa, le cambiaron mantel, platos cubiertos etc. y nos instalamos.
- (a la capitana de meseras) A ver, ¿quién nos va a atender? ¿Dónde está Dorothy?
- A Dorothy la tengo atendiendo las mesas del fondo ingeniero...
- ¡Ah qué la verga! ¿Y a quién me va a mandar?
- Le voy a mandar a Claudia...
- No ésa no, está muy pendeja la pobre.
- Si quiere le mando a "La Jarochita"
- ¿Quién es La Jarochita? Bueno pues, a la chingada, mándame a La Jarochita!

Llega una mesera con el traje típico del Sanborns, morena aperlada, cabello negro recogido en un chongo, muy formal, pero como dicen los gringos "with an attitude", yo creo que en el mandil, en el puro medio y con una flecha apuntando hacia abajo le faltaba el letrero que reza "Por aquí me paso a los clientes difíciles".

- ¿Tú eres La Jarochita?
- Para servirle ingeniero...
- A tí no te conocía.
- Porque no ha querido ingeniero.
- ¿Y dónde tienen a Dorothy? ¿Me la castigaron? Háblale , mínimo para saludarla.
- Ahorita se la mando, ¿qué les traigo de tomar?

Pedimos café y mi jefe una limonada con agua mineral. Llegó la tal Dorothy, güerita, chaparrita, guapetona...

- ¿Cómo estás Dorothy?
- Bien ingeniero. ¡Qué milagro verlo por acá!
- Traje a darles de comer a este par de pendejos.
- Ya tenía rato de no verlo por acá ¿Por qué ya no viene?
- Porque ya perdí la esperanza Dorothy - dice el jefe mientras le toma con los dedos el dobladillo del mandil a la mesera.
- ¿Cómo que ya perdió la esperanza?
- Sí, cada vez que vengo te pido las nalgas y no me has querido cumplir...
- ¡Aay ingenierooo! - procede a la fuga la tal Dorothy con la cara roja de vergüenza
- Jejejejeje! - Se ríe el jefe con una sonrisa lasciva.

Llega la jarochita con las bebidas:
- ¿Qué pasó? ¿Ya espantó a la Dorothy?
- No aguanta nada la pobre, a ver arrímame un muslo...
- ¿Y pa' qué quiere uno solo?
- ¡Ah qué verga me saliste! Cuántas tuviste que mamar para que te dieran este trabajo?
- Muchas ingeniero, pero de pura gente distinguida.
- Te faltó la mía.
- Ya ve pues...
- JAJAJAJA... a ver, tómanos la orden. Yo quiero unos molletes dobles, y estos pendejos que pidan lo que quieran.
- ¡Ay ingeniero, no se ven nada pendejos, al contrario, se ven inteligentes y muy guapos!
- ¿Inteligentes? Son un par de puñetas que recogí de la calle y jalan para mí...
- Bueno, por lo menos por fin lo veo en agradable compañía - dice La Jarochita mientras le toca el hombro a mi compañero.
- ¿Chingado ya estás puteando tan temprano?
- Hay que sacar pa'l gasto ingeniero...
- ¡Los dos están casados ¿eh?!
- ¡Bueno, pero si no quiero nada con sus esposas!
- Pinche Jarochita, ¿y conmigo por qué no puteas?
- ¡Porque soy muy exigente, y luego no cumple!
- A ver, dime qué me pedirías.
- Un seguro de vida suyo, pero a mi nombre y una botella de alcohol.
- ¿Whisky o qué?
- No, alcohol de caña para embalsamarlo, porque lo voy a hacer pedazos.
- JAJAJAJA... no mames, anda, tráeme dos servilletas más...

La jarochita trae dos de las serviletas de tela de otra mesa, una se la entrega y la otra se la pone sobre el muslo.

- Ais'tá. Cuando quiera le aviento la sábana.
- ¿Y para qué quiero tu pinche sábana? Ha de estar toda embarrada de mocos...
- Pero ni una sola gota de eso es suyo ingeniero, lástima...
- Ah porque no me he arrimado a tu cama!
- Dioqis, ¡se me hace que ya no le salen!

Se aleja triunfante la jarochita después de habernos servido los molletes, le vimos el rostro al jefe que ya estaba como camarón cocido y optamos por callarnos la boca.

Después de la plática con el jefe, llegó la hora de pagar la cuenta. La mujer entregó el ticket con el cambio...
- ¿Qué le pareció el servicio ingeniero?
- Nombre Jarochita, 'tas cabrona, contigo me paro.
- ¡Si quiere le sigo!
- ¡No, no! Que me paro, me pongo de pie, me cuadro... Ai' muere ¡Yaaa no mames Jarochita!
- Ah bueno, porque si con una mamada no le funciona, ¡mire...! - dice la veracruzana sacando de la bolsita del mandil un cajita de cartón blanco en la que visiblemente se podía leer "Viagra"

Soltamos sonora carcajada los tres mientras vimos a La Jarochita alejarse y menear las caderas. el jefe le dejó como 200 pesos de propina.

Definitivamente, yo creo que en el mandil, en el puro medio y con una flecha indicando hacia abajo le faltó el letrero de "Por aquí me paso a los clientes difíciles".

¡Salud! Mis respetos para "La Jarochita".

Thursday, October 09, 2008

La Frase de la Semana 9-10-08

"¡Ya me cargó el Payaso!"
La frase de la semana, para acrecentar un poco nuestro vocabulario, cultura y cacumen.

Mucha
gente utiliza esta frase como un equivalente menos soez a "Ya me cargó la chingada", o "Me lleva la.... que me trajo", alusión de que la cosas van REALMENTE MAL.

¿Por qué? ¿a qué se debe que referimos la peor de las suertes a un caracter que nos hace reir, nos divierte y nos hace recordar que la vida no se debe tomar tan en serio?

¿Cómo es que me carga el payaso? ¿a dónde me lleva (o acaso me trae de regreso)? ¿me carga en su espalda? ¿en sus brazos? ¿en sus hombros?

Buscando un poco de trasfondo para esta frase me di cuenta que nada tiene que ver con el acto de yacer en los brazos de un histriónico personaje con exceso de maquillaje.

Según mi investigación, todo hace efectivamente referencia a un payaso, pero no es un payaso común y corriente. No hablamos de los amiguitos de todos los niños como Pipo, Bozo, Cepillín o Ronald McDonald; se trata del payasito Pennywise, el monstruo malo de la novela "Eso" (IT), escrita por el maestrísimo Stephen King, publicada en 1986, adaptada para la TV en 1990 en un largometraje de 3 horas. Pennywise es caracterizado por Tim Curry, un actor genial y con muuucho peso y trayectoria; alguien quien aún sin maquillaje inspira miedo en propios y extraños.

¿Y qué tiene que ver esta horrenda y antigua criatura?


Para los que leimos la novela y/o vimos la película, recordamos la escena en el alcantarillado donde los niños protagonistas son atacados por Pennywise; al abusivo Henry Bowers se le pone el cabello blanco por el terror que experimenta, pero es uno de sus esbirros, "Eructo" Huggins quien es inmovilizado por una luz que lo hace levitar e introducirse a huevo por una tubería donde apenas cabe hacia el cubil de esta voraz pesadilla. Contemplamos con horror que el imberbe chamaco está imposibilitado para hablar (y menos pedir ayuda), defenderse, desafanarse y huir. Literalmente, se lo carga el Payaso...

¡De ahí la frase...!

Es todo por esta semana. Gracias por acompañarme por estos momentos ¡Ahora sabes algo que quizás no sabías!

Se aceptan colaboraciones, opiniones, correcciones, sugerencias y/o comentarios a este segmento cultural.

¡Hay que leer más!

Monday, October 06, 2008

Happy Tree Friends

Mi hijo me había pedido permiso para ver unas caricaturas en YouTube de unos animalitos, de algo llamado Happy Tree Friends. Me explicó que era de unas ardillitas y le dije que sí... Estaba cocinando lentejas mientras escucho a mi hijo muerto de risa viendo las dichosas caricaturas pero yo escuchaba gritos de animalitos, luego me asomé a ver por qué estaba gritando...

Sangre (mucha sangre)...

Vísceras...

Decapitaciones...

Cerebros expuestos...

Pérdida de miembros...

Todo en forma de animalitos de colores muy llamativos con vocecitas y formas "bien cute". Ardillitas, castores, alces, conejitos, etc... todos envueltos en una orgía de sangre sin sentido.

No lo encuentro divertido. De hecho, no quisiera pecar de ambientalista, pero no he conocido animales así de idiotas o capaces de semejantes actos. Eso sí, son un buen reflejo de la abismal estupidez humana caricaturizada en seres (que no la deben ni la temen) porque nos da miedo como seres humanos darnos cuenta o reconocer de que somos capaces de hacer todo lo ahí animado, y en vez de ilustrarnos, le pasamos la bolita a estos seres.

Si viéramos esos actos a todo color en un noticiero nos horrorizamos, pero si vemos programas de estos, nos morimos de risa y nos parece tierno y "kiut" (cute).

Y luego nos preguntamos por qué un chamaco tomó la pistola de su padre, se la llevó a la escuela, mató a 9 compañeros y luego se voló la tapa de los sesos...

Luego nos asqueamos porque aparecieron cuerpos decapitados, o nos sorprendemos por el Santoy y la novia cuyo nombre he decidido olvidar...

Cómo es que le tiramos a los periódicos y a los noticieros por amarillistas, pero de inmediato nos vamos a la tele o a la compu y nos morimos de risa viendo estas pendejadas? ¡ES LO MISMO CON UNA CHINGADA!

Y a grito de "no pasa nada, son caricaturas" todavía le damos permiso a nuestros hijos de ver esto?

¿Qué de bueno enseñan esas caricaturas?

Que alguien (que sepa) me diga, plis

Ganas de Trabajar!


Esto si es un claro ejemplo de una persona con ganas de trabajar de manera honrada y honesta.

"Un amigo" comenta que le han marcado a Lupita y que efectivamente ofrece el servicio que se menciona en el anuncio.

Habrá que ver quién es el valiente que se anima a probar la calidad del material...