De la Guerra al Ego por mis Sueños a Alcanzar

De los sueños que han pasado por mi cabeza al estar dormido (o despierto) está el de convertirme en un orador profesional, o como dirían los gringos, to become a Power Speaker.

Criss (Mr. Verdy) comentó en un post reciente que sonaba como un Alex Day pero en copia al carbón. Y llegué a la conclusión de que eso es lo que quiero hacer en mi vida. Utilizar mi voz, mi espíritu y mi energía para inspirar en los demás esa motivación que a veces les hace falta. Darles una patada en el trasero con la finalidad de que por lo menos a huevo den un forzado paso hacia adelante que se convertirá en caminata, marcha, marthón y carrera hacia donde la gente decida.

No quisiera convertirme en un demagogo, es decir, darle o decirle a la gente exactamente lo que quieren escuchar, sino al contrario compartirles lo que realmente NO quieren escuchar y que la gente tome conciencia y la decisión de cambiar sus vidas para mejorar.

Ahora, ¿por qué estoy plasmando mi sueño en este blog?

Porque siempre me ha asustado el compromiso, y el compromiso con uno mismo es el más difícil de sostener. Y a veces me engaño pensando que sí he participado de mis sueños, y he hecho lo debido al alcance de mi mano para contribuir a llevar a cabo mis sueños hasta que escuché y leí la siguiente frase.

"The difference between involvement and commitment is like a ham & eggs breakfast. The chicken was involved, but the pig was commited"

(La diferencia entre colaboración y compromiso es como un desayuno de huevos con jamón, la gallina contribuyó, pero el cerdo estaba comprometido)

Este post es un declaración de guerra para mi ego que es quien me ha estado impidendo avanzar enla vida. Es una manera de decirle (GRITARLE!) al mundo qué es lo que quiero ser. De modo que cuando me tope a mis amigos y al resto del mundo de frente y me pregunten acerca de mi sueño de volverme un Power Speaker a mi ego le dé vergüenza contestar que le dió miedo salir del puto cascarón donde me tiene metido.

No habrá a quién echarle la culpa
No habrá a quién acusar que me puso una pistola en la cabeza y me obligó a no salir a por mi vida.
No habrá excusas... ninguna excusa es válida.

En la vida hay excusas y resultados. Los resultados no siempre serán buenos. Un buen resultado te impulsa, un mal resultado hace que saques la brújula reorientes tus esfuerzos, que digas "Sí ES, pero por aquí no...". Pero las excusas no valen nada y no me llevan a nada.

Solo queda el compromiso por delante. El compromiso conmigo mismo, porque no le debo nada a nadie. Pero nadie vivirá mi vida por mí, y si hay algo por hacer, nadie lo hará por mí. O peor aún, alguien lo hará y se llevará el oro y la gloria. Que si dejo pasar mi vida se perderá algo valioso que pudo haber cambiado al mundo. Pero nunca lo sabré si nunca lo intento.


O ME! O life!... of the questions of these recurring;
Of the endless trains of the faithless—of cities fill’d with the foolish;
Of myself forever reproaching myself, (for who more foolish than I, and who more faithless?)
Of eyes that vainly crave the light—of the objects mean—of the struggle ever renew’d;
Of the poor results of all—of the plodding and sordid crowds I see around me;
Of the empty and useless years of the rest—with the rest me intertwined;
The question, O me! so sad, recurring—What good amid these, O me, O life?

Answer.

That you are here—that life exists, and identity;
That the powerful play goes on, and you will contribute a verse.

- Walt Whitman, Leaves of Grass