Tuesday, April 25, 2006

La Grandesa, Esplendor y Bondad... del Reino de Bretonia

¿Fotos? ¡¡¡Dirás LIENZOS, pintados por Juanito Da Vinci el Tileano, en los cuales se muestre la Grandesa , Esplendor y Bondad de los Caballeros de Bretonnia!!!

(Este es un extracto de una publicación de mi amigo Ricardo Granados para el Foro de discusión de Warhammer. No es por joder a mi amigo por su error de escritura, sino porque sé que le pone tanto entusiasmo y tanto feeling que a la hora de escribir, ésos errores le quitan mucha fuerza al texto, y la esencia misma de lo que él quiere plasmar en palabras se pierde. A continuación una breve explicación de qué es lo que me pasó por la cabeza y a lo que yo imagino que Ricardo se estaba refiriendo con "Grandesa" en el contexto del reino de Bretonia)

La Grandesa era una yegua que pertenecía a la Gran Duquesa de Tahifalën (pronúnciese Ta-jai-falén) quien padecía de intensos dolores crónicos en el lomo ya que la Duquesa medía 2.32 mts. de estatura y su grupa (la de la duquesa) amasaba gran cantidad de carnes y otras menudencias que hacían de un simple paseo matinal en toda una tortura medieval para la pobre Grandesa.

La Grandesa no era precismente un percherón, sino una potranca de grisásceo pelaje y linaje morisco. Lamentablemente en los días de paseo por los cotos de caza y jardines el efecto visual de la Duquesa montando a su equino era punto menos que deplorable (incluso el gran Visir comentaba que le quedaría mejor montar un gran danés, de este modo la Duquesa pondría los pies en el suelo y no cargaría todo su peso sobre el triste cuaco).

Esplendor en cambio era todo un garañón digno hijo de Bretonia. No estoy hablando de un potranco, sino del tercer hijo varón de Lord Etlaeno IV apodado "El Siniestro" (o zurdo). Su verdadero nombre es Splenditello, pero sonaba mucho a champú, así que decidió darle un giro menos rebuscado y más apantallante.

Modosito muchacho, de finos rasgos y blonda cabellera sólo levantaba 1.59 del suelo. Sin embargo esgrimía tremendo fierro cuya hoja medía 1.8 metros con una sola mano. Era tan fuerte de brazos que se decía que podía desrraigar un manzano joven con ambas manos. A pesar de sus finos rasgos y sus suaves maneras, sembraba el pánico en las filas enemigas y en las recámaras de las hijas de los grandes señores de Bretonia pues se preciaba de fiero guerrero.

Se rumoraba que su mandoble no era para compensar nada, sino para tener alcance en la batalla, y las intrigas palaciegas abominaban acerca de su hombría, asegurando que lo que le faltaba de estatura lo compensaba de otra manera, y no precisamente con su acero de batalla.

Bondad "era" el caballo favorito de Irasema, la hija de Godwin-Alana, heredero a la corona de Bretonia. No hay mucho qué decir al respecto, ya que era el jamelgo más manso del reino. Los caballos más mansos que Bondad eran enterrados o convertidos en pegamento. Irasema catalogaba a Bondad como un brioso e indomable corcel, lo cual dejaba muy poco a elucubrar sobre las habilidades amazónicas de la nieta del rey.

Y es así como suelo escribir mis historias, con mucha imaginación. De esto, tengo muuucho material. Ni modo Granados, te lo mereces...

2 Comments:

At Wednesday, April 26, 2006, Blogger monk said...

estos escritos son bajo el efecto de "yerba mala nunca muere", o caso omiso, 3 horas de oler pintura pa zapatos!

a mi no me chingan!

 
At Thursday, April 27, 2006, Blogger El Negro said...

Lo de la Yerba mala, paso, no fumos de esa madre.
Pero por otro lado, en efecto muy buen Monko, se trata de grasa para zapatos marca "El Oso". Me intriga saber cómo adivinaste (a mí no me chingas, tú que ya has probado la fórmula no seas gacho, dime como evitar los efectos colaterales)

 

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